Periodista, novelista, ensayista y dramaturgo. Tras estudiar en el instituto almeriense, colabora en los diarios locales El Popular, El Radical y La Independencia. Instalado en Madrid, es redactor de La Correspondencia Militar y sus crónicas históricas aparecen en La Esfera, Blanco y Negro, Nuevo Mundo y Mundo Gráfico. Escribe novelas como La salerosa, La niña bonita, Juventud, El toque de oración, Celina, la que mal casó, Lo que se lleva la vida; obras de teatro, algunas en colaboración con Muñoz Seca, González Hompanera, López Monís y Manuel Carballeda: Cosas que vuelven, Lo de siempre, El rayo, El tío político, La tierra madre, Gaviotas, El fin del mundo, El alcalde de Móstoles; ensayos históricos y literarios como Bécquer, Leyendas españolas, Románticos y bohemios, Don Juan Tenorio: el teatro, la novela y la poesía. La fama y el éxito económico le llegan con El niño de las monjas (1922), novela de tema taurino y tinte melodramático, que adaptó para el teatro en 1923 y que conoció cuatro versiones cinematográficas a cargo de los directores Antonio Calvache (1925), José Buchs (1935), Mario del Río (1944) e Ignacio Farrés Iquino (1958). Protagonizó la última el torero almeriense Enrique Vera García.