Hijo de un abogado y registrador de la propiedad de la citada localidad catalana, tras sus estudios inacabados de bachillerato se traslada a la capital barcelonesa comenzando a trabajar de dependiente de un corredor de bolsa, conociendo todos los entresijos de los negocios financieros y adquirió pronta fortuna. En 1879, con un importante capital acumulado, se trasladó a París, donde iniciará negocios que le llevarán a ser miembro de importantes sociedades como Societé Inmobiliere, L´acien Comptoir y, finalmente, en 1887, Crédit Mobiliér, la que llegó a dirigir y a la que arrastró a una serie de inversiones y negocios a veces no muy acertados: Banco de Madrid, Compañía de Ferrocarriles de Puerto Rico, de los Caminos de Hierros Colombianos o de los Caminos de Hierros del Sur de España.

      Pronto aprende a manejarse bien en los medios políticos madrileños y a aprovechar las facilidades del mercado financiero parisino. Aspiró infructuosamente a ser candidato a diputado a Cortes como independiente por la circunscripción de Almería en las elecciones de 1896. A partir de 1900 se le multiplican los problemas y hubo de abandonar sucesivamente los Ferrocarriles de Puerto Rico, Banco de Madrid y Crédit Mobilier, haciéndose con la mayor parte de su empresa ferroviaria española El ferrocarril del Sur de España, compañía a la que estaba vinculado desde su fundación. Esta empresa sería la concesionaria de la línea Linares-Almería, cuyos primeros tramos fueron inaugurados en 1885. En 1903 alcanza la presidencia que ostentará hasta su muerte.